NUEVA YORK. Una dominicana fue detenida acusada por la Policía de Providence (Rhode Island) de morder en un brazo a un sargento y escupirles las caras a varios policías en el cuartel, en medio de un altercado en el que ella se resistió al arresto, negándose a salir del carril de la ventanilla de servicio de un restaurante de la cadena Wendy´s, donde fue declarada no grata.
La policía dijo que Dailine López, de 23 años, mordió al oficial cuando los policías trataban de sacarla del carro, la madrugada del pasado sábado.
El gerente del restaurante situado en el 731 de la calle Eddy, informó a la policía a las 12:30 de la madrugada que López se rehusó a hacer la fila y exigió que la atendieran primero que a todos los clientes que estaban delante de ella y comenzó a maldecir y amenazar después de que le dijeran que tenía que esperarse, según explicó el comandante Thomas Verdi de la policía de Providence.
Cuando llegaron los policías, López los amenazó y juró enfrentarlos después de que le pidieron que moviera su automóvil fuera del carril, diciéndoles que no se movería hasta que le sirvieran la comida, asegura el comandante.
Agrega que cuando los agentes intentaron sacar a López del automóvil y la detuvieron por conducta desordenada, ella se resistió, golpeando a los oficiales y mordiendo al sargento Patrick Potter en el antebrazo izquierdo.
Afirma que la acusada golpeó a los oficiales, que la sacaron a la fuerza del vehículo, la tiraron al suelo boca abajo, la dominaron y la esposaron.
López procedió a golpearse la cabeza en la parte trasera del carro patrullero mientras era transportada al cuartel.
La policía dijo que ningún oficial la golpeó en la cabeza, mientras estaba en el suelo.
Ella también escupió en las caras de los oficiales mientras estaba en el ascensor de la comisaría y en el pasillo de las celdas, dijo la policía.
Ella está acusada de dos cargos de asalto simple y un cargo de resistencia al arresto, conducta desordenada y asalto a un oficial de policía.
Tendrá que presentarse en la corte para una audiencia de peligrosidad la semana próxima.
Según el oficial Verdi, todos los oficiales que estaban en la escena tenían activadas las cámaras corporales, en las que grabaron el incidente.