La corbata, una prenda que el presidente Luis Abinader utiliza con poca frecuencia, volvió a formar parte de su atuendo durante una ceremonia académica. Generalmente, la usa en momentos especiales. Y el sábado fue uno de ellos: el jefe del Estado llegó a la Gran Arena del Cibao con un traje azul oscuro y una corbata de estampados, en un tono similar pero más vibrante, para recibir un nuevo título de doctor ‘honoris causa’ de la Universidad Tecnológica de Santiago (Utesa).
El mandatario ya suma cinco doctorados honoríficos en su quinquenio de Gobierno. Pero, antes de repasar cada uno de esos títulos, es importante entender tres aspectos: el significado de ese reconocimiento, por qué una universidad decide otorgarlo a una persona en particular y cómo se eligen los candidatos.
La razón, por lo tanto, es sencilla: el título se concede debido a las contribuciones importantes de una persona en un campo específico, como las artes, las letras, la ciencia, la cultura, la tecnología o lo social, que han servido de manera destacada a la comunidad o bien, podría ser, un reconocimiento a su trayectoria profesional. También, por su contribución al desarrollo y la promoción de la academia que otorga el honor.
Detalla el Listin Diario que con respecto a la elección, la UEMC explica: “Aunque cada universidad tiene su reglamento, por norma general la concesión del grado de doctor honoris causa puede ser formulada por cualquier órgano colegiado de la universidad: Claustro, Consejo de Gobierno, Juntas de escuela o facultad”.
La vestimenta, además, constituye un elemento simbólico en este tipo de ceremonias. El sábado, por ejemplo, Abinader lució una túnica académica negra con franjas doradas en las mangas, una estola verde con ribetes amarillos, una medalla dorada y un birrete negro cuadrado, según las imágenes difundidas por su equipo de prensa.
Serie de títulos
Octubre, 2023. La Universidad Tecnológica del Sur (Utesur) otorgó al presidente Abinader su primer doctorado honoris causa en “políticas públicas”. La distinción fue por haber tomado en cuenta a las instituciones de educación superior en sus políticas educativas desde que asumió la presidencia en 2020, en plena pandemia de la Covid-19.
Febrero, 2024. Cuatro meses después, la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU) concedió la máxima distinción de la academia al mandatario por su “firme” y “exitosa lucha” por la preservación de la salud en el país frente al coronavirus, su manejo en la recuperación económica postpandemia, y por su lucha en los ámbitos locales e internacionales, así como por la defensa de la soberanía nacional.
23 de noviembre, 2024. Abinader recibió nueve meses después el doctorado honorífico en “ciencias agroindustriales” de la Universidad ISA, en reconocimiento a su “liderazgo visionario” y las iniciativas impulsadas para fortalecer los programas educativos y el sector agroindustrial y productivo del país.
29 de noviembre, 2024. En una semana, el gobernante recibió dos títulos honoríficos: siete días después, la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) otorgó la distinción académica de doctor por sus aportes a la “institucionalidad”, la “transparencia”, al “mejoramiento del Estado” y la “defensa de los valores democráticos”.
Marzo, 2025. La Universidad Tecnológica de Santiago concedió a Abinader el doctorado honorífico el sábado por su liderazgo y aportes a la nación dominicana, a través de su firme gestión como estadista, empresario, educador y ciudadano ejemplar.
“Con humildad y con gratitud, acepto este honor y reafirmo mi compromiso con la educación, la democracia y el bienestar de nuestro amado pueblo dominicano”, dijo el jefe del Estado frente a decenas de graduandos y las autoridades universitarias.