Un tribunal de Santiago impuso la prisión preventiva, como medida de coerción, contra un hombre y su pareja sentimental investigados por cometer tortura, barbarie y violación sexual contra una niña de 11 años de edad.
Según el Ministerio Público, la víctima sufría violación sexual, golpizas y todo tipo de vejámenes desde que tenía 9 años de edad, y que la mujer tenía conocimiento de los abusos que sufría la niña y, además de ejercer complicidad, también se convirtió en la ejecutora de los abusos.
Una comunicación de prensa de la Procuraduría General afirma que la investigación es realizada por la Unidad de Atención Integral a Víctimas de Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales de la Fiscalía, que ha dispuesto de un personal, incluyendo a psicólogos, para el levantamiento de las pesquisas.
Los informes físicos y emocionales de la menor “advierten de la gravedad del daño que estos abusos” le ocasionaron. No se informa el parentesco de la víctima con los acusados.
La medida de coerción fue impuesta por la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de Santiago en atención a la calificación jurídica provisional que se le imputa al hombre, consistente en los tipos penales de tortura o actos de barbarie, violación sexual, maltrato, abuso físico, psicológico y sexual.
La imputación a la pareja
Contra la imputada se presentaron cargos provisionales de maltrato, abuso físico, psicológico y sexual contra los niños, niñas y adolescentes.
La Fiscalía de Santiago recordó que todos los niños, niñas y adolescentes deben disfrutar plenamente de sus derechos fundamentales y precisó que es obligación de asegurarle el pleno y efectivo disfrute y ejercicio de estos derechos.
