Al menos 47 personas han muerto y 43 han resultado heridas en el incendio ocurrido hoy de una fábrica de fuegos artificiales en la ciudad de Tangeran, situada a 25 kilómetros al oeste de la capital indonesia, según las autoridades.
“Sospechamos que hay todavía cuerpos atrapados dentro del edificio”, declaró a Efe el portavoz de la Brigada de Bomberos Herman, que como muchos indonesios tiene un solo nombre.
La Agencia Nacional Indonesia de Gestión de Desastres indicó que los heridos han sido trasladados a tres centros sanitarios de la zona, mientras que los cadáveres han sido llevados al Hospital Policial de Kramatjati, en Yakarta.
Testigos presenciales declararon a las autoridades que una explosión dañó parte del techo del edificio y provocó un “fuego descontrolado”, según el informe policial provisional.
Imágenes de vídeo mostradas en las televisiones locales muestran una enorme columna de humo negro saliendo de la fábrica.
La Policía de Tangeran indicó que el fuego estalló por la mañana cuando 103 trabajadores se encontraban en esta fábrica ubicada en el subdistrito de Kosambi, que llevaba abierta menos de dos meses.
El ruido de la explosión provocó el pánico en un instituto en las cercanías de la fábrica, donde los estudiantes y profesores abandonaron el recinto por el miedo de que hubiese ocurrido algo en el edificio.
Los bomberos tardaron tres horas en extinguir las llamas que, según dijo Herman, pudieron ser causadas por un cortocircuito.